Pesar por el fallecimiento del docente Cr. Jorge Vazón

La Asociación Educacionista La Fraternidad, la Universidad de Concepción del Uruguay y la Facultad de Ciencias Económicas lamentan el fallecimiento del Cr. Jorge Vazón, de entrañable pertenencia y reconocimiento por parte de toda la comunidad de Ciencias Económicas. Vazón fue vicepresidente del Honorable Consejo Directivo de la AELF, auditor y asesor económico-financiero de la Presidencia, como así también Decano, Vicedecano y docente de la Facultad de Ciencias Económicas, habiendo sido reconocido como el docente con más antigüedad.
Será siempre recordado como un gran entusiasta de la educación, con valores muy arraigados, con humildad y carisma. Un hombre al servicio de la profesión, de los estudiantes y de la institución.
No sólo se fue un gran docente y profesional, ha partido un colega, un amigo y un padre para muchos de los que de alguna forma compartieron parte de su vida.
Acompañando a su familia, la Universidad y la Facultad expresan su dolor y el de quienes han sido sus alumnos y compañeros de trabajo.

A continuación, compartimos el mensaje que Vazón dio cuando se celebró el 50° aniversario de la Facultad de Ciencias Económicas, oportunidad en la cual se le rindió homenaje:
“Me siento honrado de estar con Ustedes en este acto de homenaje a los 50 años de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Concepción del Uruguay y recibir una distinción.
Cuando te piden que hables, o tienes muchos años o una larga amistad y afecto mutuo. En este caso se dan las dos condiciones.
Estaba en mi casa una mañana. Me tocan el timbre. Era el Contador Miguel Moreno. Me dice: tienes que ir a dar clase a la Facultad. ¿Yo? le digo totalmente sorprendido. Como no aprendí a decir que no aquí estoy prácticamente desde el inicio.
Di las primeras clases en el histórico Colegio Nacional del que fui alumno. No lo podía creer.
Hay que ser visionario para que a alguien se le ocurra fundar una Universidad privada hace 50 años. Un reconocimiento a los que lo hicieron especialmente al Dr. Héctor Buenaventura Sauret, el padre del actual Rector el Dr. Héctor Sauret.
Con el Dr. Sauret nos conocemos desde el secundario. Participamos de unas elecciones del centro de estudiantes. Salimos terceros con el dato importante que eran sólo tres listas.
¿Que logró esta Facultad de Ciencias Económicas? Logró que muchísimos jóvenes de la ciudad, de las zonas cercanas y de los centros regionales pudieran acceder a la educación superior a pocas cuadras de su casa o a minutos de viaje. Esto genera un impacto social impresionante. Hoy las empresas de la zona tienen cantidad de graduados que le agregan valor a su actividad.
En mi tiempo estudiábamos mayoritariamente en La Plata o en Buenos Aires, con rutas muy malas y con todos los costos que esto significaba.
Creo que la gente que inició todo esto puso una mirada en el futuro en un mundo en cambio permanente.
Informes que leemos continuamente nos dicen que en las próximas décadas muchos trabajos que desarrollan los humanos serán reemplazados por las máquinas. Las ciudades debieron comprender que para sobrevivir había que cambiar e innovar. La automatización y la inteligencia artificial así lo demandan. Hoy decirlo es sencillo, pensarlo hace 50 años no lo era.
Los emprendedores son los actores que piensan en los desafíos que planteará el futuro. Nosotros creamos el futuro y es un enorme desafío ante las crisis recurrentes que se dan en nuestro país, de las cuales toda la sociedad debe sentirse responsable.
Los avances tecnológicos modifican la vida de las personas generando una enorme incertidumbre. ¿Qué podemos hacer? Esa es la gran cuestión que debemos resolver y que estar en una Universidad nos da la oportunidad de pensar también que puedo hacer.
Una vez escribí en una tarjeta de la Facultad que nuestro objetivo era cambiar la vida futura a nuestros estudiantes. Creo que seguramente lo hemos conseguido. También en nuestras cátedras incorporamos la responsabilidad social con la participación de RUS totalmente desinteresada para que nuestros graduados incorporen este concepto en la toma de decisiones en las empresas en las que les toque participar.
También debemos decir que no hay futuro si seguimos dilapidando recursos de nuestro planeta, si lo seguimos contaminando y sacando a los más desprotegidos del sistema.
La misión de la Universidad es educar y capacitar para enfrentar los grandes retos.
Un objetivo que propone la ONU es garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida. El sistema y los docentes debemos actualizarnos permanentemente porque los alumnos en cuanto a tecnología ya cuentan con todas esas habilidades significativas para su futuro.
Alvin Toffler dice que los analfabetos del Siglo XXI no serán quienes no sepan leer ni escribir, sino quienes no sepan aprender, desaprender y re-aprender.
Como pequeña contribución a la Facultad incorporamos un taller en el cual los alumnos crean empresas saliendo a la calle a investigar. Estamos llenos de anécdotas como cuando desarrollaron un emprendimiento de una concesionaria de autos. Consiguieron autorización para cortar el tránsito y trajeron autos cero kilómetro. Se imaginan como estábamos en la cátedra,
Otra vez presentaron una colmena con miles de abejas. Siempre a la exposición venían familiares o invitados. Les daban agua por un agujero. Estábamos en el aula BARI. Me imaginaba el desastre que sería si se escapaban.
En una oportunidad salieron con un autito a detectar infracciones de tránsito. Estaban sorprendidos de la cantidad que verificaron en poco rato.
En fin, tengo cientos de anécdotas a lo largo de tantos años. Aprovecho para agradecer a cada uno de mis colegas de cada una de mis cátedras. No los nombro para no omitir a ninguno pero todos saben que les tengo un enorme afecto.
Otra idea fue una materia tratando de incorporarle al contador público la comprensión de distintas herramientas para la gestión.
Además gané por concurso el Seminario de Práctica Profesional (aclarando que fui el único postulante). Ahí incorporamos el dictado de clases por profesores invitados o ejecutivos de empresas que contaron sus experiencias. Los alumnos elaboran Tesinas que muchas veces son trabajos de investigación
Nunca recibí observación alguna con estos humildes emprendimientos así que estoy muy agradecido a las autoridades que no los objetaron.
Ingresé como ayudante de trabajos prácticos, después fuio jefe de trabajos prácticos, Pro Titular y como no aprendí a decir que no, Vice Decano a propuesta del Dr. Sauret y Decano a propuesta del Dr. Marcelo Granillo por su participación durante cuatro años como diputado en la ciudad de Paraná. Les agradezco por confiar en mí.
Hoy sólo soy “profe” como me llaman mis alumnos y como todo empieza también todo termina por eso trato que mis colaboradores actuales me superen.
Un docente disfruta si en el futuro sus ex alumnos, con sus logros lo superan. Es nuestra mayor remuneración. Direccionarnos a que el estudiante le dé importancia a la toma de decisiones, al trabajo en equipo, al pensamiento crítico, a la solución de problemas, a la preparación de presentaciones, etc. No sé si lo logramos pero hemos tratado de hacerlo.
Gracias a todos, a la Institución, a la Universidad y a la Facultad, a mis compañeros docentes, a los no docentes, a los colegas que ya no están, a mis alumnos y a mis ex alumnos que lograron que tenga que aprender, desaprender y re-aprender permanentemente, a todos los docentes que participaron y participan de mis cátedras (no los nombro porque son muchos y no quiero omitir a ninguno).
A mi familia porque aceptó que muchas horas se las dedique a la Facultad. Ahora a la vejez me están pidiendo que vaya terminando mi historia de manera lenta, pero estoy feliz de haber colaborado a este gran desarrollo.
¿Qué sería de la vida si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo? Dijo Vincent van Gogh. Lo relaciono con el primer examen virtual de la Universidad durante la pandemia.
Me pregunto permanentemente cómo soy como profesor. Trato que mis alumnos tengan pensamiento crítico, opinen profesionalmente, usen la creatividad y estén permanentemente actualizados en lo macro y en lo micro para que siempre tengan en cuenta el contexto y sean realistas. Espero haberlo logrado aunque sólo sea parcialmente.
También diría, para terminar que me sigo sintiendo parte de esta casa educativa, y por eso a pesar de mi edad trato de seguir aportando y me cuesta decidir irme porque hay mucha historia, dedicación y amor hacia los alumnos, compañeros de trabajo docentes y no docentes y hacia lo que la Universidad de Concepción del Uruguay representa para nuestra ciudad su entorno y los lugares en que desarrolla su actividad.
Les deseo a todos el mayor de los éxitos en la continuidad de este gran emprendimiento porque, como advierten muchos líderes mundiales, tenemos el poder de destruir el planeta pero todavía no podemos escapar de él.
Muchas gracias”.